Aunque esté situado entre las montañas, el lago de Ginebra -gracias a la gran cantidad de agua que contiene- crea alrededor de él un microclima. En invierno, el lago libera el calor retenido durante el verano y atenúa el invierno montañero. En verano, refresca todo su alrededor.
Cuando se dan ciertas condiciones climáticas en invierno, el aire seco estancado en la alta y media atmósfera, se acumula la humedad más caliente que sale del lago y se transforma en una neblina espesa que se concentra a 200 o 300 m de altura, durante dos a tres semanas. Este mar de nubes que se agranda cada vez más, termina por desbordarse e invadir los valles adyacentes hasta una altura de 800 a 1000 m.
Turismo
Unas 20 000 embarcaciones navegan en el lago y se dedican principalmente a la pesca, el transporte o el recreo.
Además de las ciudades importantes que rodean el lago, en la costa suiza se encuentra el Castillo de Chillon (cantón de Vaud), popularizado por Rousseau y por Lord Byron, y la famosa villa Diodati. Del lado francés se halla la localidad fortificada de Yvoire, llamada la Perla del Lemán, la playa de Excenevex y el Castillo de Ripaille.
Ciudades
A sus orillas están, entre las más importantes, del lado suizo, las ciudades de Ginebra, Nyon, Lausana (sede del Comité Olímpico Internacional, Vevey (sede de la multinacional Nestlé) y Montreux (conocida por su festival de Jazz y donde, frente al lago, también se halla la estatua que conmemora a Freddie Mercury). Entre las del lado francés, Thonon-les-Bains (balneario), Yvoire (pequeño pueblo medieval) y Évian-les-Bains (balneario y fuente de agua mineral).